Vampire: The Masquerade - Redemption

El universo del Mundo de las Tinieblas donde transcurre Vampire: The Masquerade es amplio y complejo. La creación de Mark Rein·Hagen se trató del primer juego publicado por la casa White Wolf en 1991 y en ella convergen diversas tramas de familias vampíricas.
Diecinueve años después de esta aparición se presentó el primer videojuego basado en este mundo.

El género escogido evidentemente no podía ser otro que el RPG. Pero aquí estábamos ante un RPG diferente. Más que nada por la propia naturaleza vampírica del ser al que manejábamos, debiendo alimentarnos de sangre periódicamente pero disponiendo de la libertad de dejar a nuestras víctimas con vida o no.

Poco a poco íbamos haciéndonos más fuertes y adquiriendo habilidades que nos ayudaban a combatir contra los demás seres del mundo de las tinieblas.

Los gráficos estaban bien realizados, sobre todo en el tema de los escenarios y junto con la música conseguían crear una gran ambientación, ideal para meterse en el papel.

No conseguí finalizarlo porque me quedé atascado en cierto punto y no progresaba. Me quedó la intriga de no saber si se debía a un bug del juego o a algo que había hecho mal e ignoraba cómo seguir. De todas formas la impresión que me quedó de él fue buena, igual algún día lo intento de nuevo.