Kingdoms of Amalur: The Reckoning





Este es un juego de rol como los de antes. Olvidaros de on-line, y de llevar a un grupo con muchos personajes, de estrategia e incluso de argumento. Y centraros en acción pura y dura.
Si lo tuviese que definir con referencias a otros juegos diría que es un "Diablo" con sistema de combate a lo "God of War". Algo por lo que se hubiese matado hace unos cuantos años pero que hoy en día pasa más desapercibido.



La verdad es que la primera vez que lo puse me horrorizó. Su aspecto gráfico, el de la primera pantalla donde apareces en una especie de mazmorra me resultó simplista y pensé que me había equivocado totalmente. Me daba más la impresión de estar viendo un juego de PS2. Por no mencionar las escenas de los diálogos con una total falta de expresividad por parte de los personajes.

Sin embargo es uno de esos juegos que te va cautivando poco a poco, y a nivel técnico después de ese inicio desangelado, poco a poco va mejorando y de vez en cuando nos sorprende con buenos detalles. En cambio otros defectos son permanentes como la carga lenta de las texturas y los comentados diálogos. Además de algún bug de principiantes, como la falta de detección de límite vertical del escenario en ocasiones en las que veremos a la cámara atravesar literalmente el suelo.

Siendo conscientes de estas limitaciones técnicas, bastante mejorables, ¿qué nos queda?. Pues contra todo pronóstico, un juego que si te engancha ya será difícil que consigas dejarlo.
Para empezar es inmenso, en cuanto a mapeado, misiones principales y secundarias, objetos, opciones...
En estas últimas podemos hacer prácticamente de todo, desde crear nuestras propias armas, gemas de engarce, pociones..
Podemos orientar nuestro personaje hacia tres vertientes posibles (poder, pericia, magia), o ir combiándolas y en función de eso ir selecionando cartas del destino, o ganando otras de giro del destino que también irán mejorando nuestras capacidades para ir enfrentándonos cada vez a adversarios más poderosos.

En cuanto a éstos el bestiario de The Reckoning he de reconocer que no está nada mal, pero para un juego tan extenso quizás hubiese sido necesario ampliarlo un poco más sobre todo al final.

En resumen, lo que ofrece este título, si se saben perdonar sus defectos son más de 70 horas de intensivo rol de acción, por supuesto para aquellos que no les importe jugar off-line.



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