Assassin's Creed

Uno de los máximos representantes de la historia reciente de los videojuegos tuvo su origen, cusiosamente, en un Prince of Persia deshechado por no encajar el personaje con la idea de un asesino.

Aquí tomamos el control de Altair, un asesino del clan de los Hashsha-shin, en la época de la Tercera Cruzada, visitando cidudades como Acre, Jerusalem y Damasco fielmente recreadas.
Uno de los momentos más sublimes es la primera vez que escalamos una atalaya y visionamos todo con esa cámara a vista de pájaro, eso es algo que no se olvida.

Básicamente nuestro objetivo será asesinar a las víctimas marcadas, para lo cual tendremos que recabar pistas en pequeñas misiones de interrogatorios, hurtos, etc.
Además tendremos misiones secundarias como asesinar a los caballeros templarios (que son más duros de pelar que los guardias normales), recoger banderas o escalar a las atalayas.

Visualmente todo el entorno destaca, y a corta distancia los detalles en las vestimentas, están también muy conseguidos. Los paseos a caballo entre las diferentes localizaciones también nos entusiasmarán al principio sobre todo, aunque luego se harán algo más pesados.

Quizás la única pega que se le pueda poner es que se hace algo repetitivo, ya que las misiones son básicamente las mismas cambiando el escenario, pero aún así resulta un grandísimo juego.

Aquí os dejo el inolvidable trailer que nos ponía los dientes largos por la época previa a su salida: